domingo, 20 de marzo de 2011

Fat admirers

Leyendo por aquí y por allí encontré una reseña de un estudio "científico" que daba datos estadísticos sobre una corriente fuera del mainstream llamada "Fat admirers". El artículo no merece la pena de las tonterías que decía pero leyendo más encontré este post llamado "I am a Fat Admirer" que voy a traducir.

Si no fuera una fat admirer yo misma de BHM (Big Handsome Men) lo entendería como el mismo problema de siempre: que el cuerpo de alguien parezca lo más importante que su mente y su comportamiento, pero no se trata de eso sino de expresar las preferencias de atracción sexual Todo el mundo tiene preferencias y cosas que le gustan más o menos, el cuerpo no es lo más importante para valorar a alguien pero negar el cuerpo es negarse a uno mismo y no se trata de eso sino de aceptarlo.

Cuando iba al colegio gravitaba en torno a las chicas más grandes, las que tenían kilos de más. Me interesaban todas las chicas en general pero de alguna manera las chicas más grandes eran con las que me apetecía hablar. Cuando pasé la pubertad y en mi adolescencia, descubrí que las chicas delgadas o 'normales' eran las chicas con las que debías salir. La presión de los colegas hacía muy difícil admitir lo que realmente te gustaba! Terminé reprimiendo mis sentimientos y saliendo con chicas de tallas normales.

(...)

Encontrar a una chica grande no es siempre tan fácil, descubrí que era complicado. Las chicas sufren más que los chicos discriminación por su peso. Estoy seguro de que las chicas más grandes tuvieron que escuchar a menudo de sus madres y sus amigos 'Has engordado, ¡nunca encontrarás novio!' así que a menudo se quedan en casa o salen con amigos con los que se sienten seguras en lugar de salir por ahí. Hay un malentendido con que a los hombres no les gustan las chicas grandes. Bueno ¡sorpresa! ¡Hay más de los que crees!
Fui a todos los sitios a los que los tios van a ligar: discos, pubs y bars, etc. (...) Imagínate acercarte a una mujer grande y decirle: 'hola, creo que eres sexy!', debido a los problemas que han sufrido por culpa de sus amigos y familia, sencillamente creían que estaba tomándoles el pelo.

(...)

Estoy orgulloso de decir que ahora estoy casado con esta maravilla mujer. Ella sabe que la aprecio por quien es. Ahora entiendo mejor qué es ser grande aunque yo mismo no lo soy.

Cuando salgo de marcha con mis amigas tenemos varios gustos: a una amiga le gustan altos, delgados, morenos y con gomina en el pelo, a otra amiga le gustan alternativos, que toquen la guitarra y bajitos, más bajitos que ella, y a otra amiga y a mí nos gustan simpáticos, con cara de buenos y gordis y fuertes.




Kevin James (qué bueno que está)

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